
La importancia de una estrategia de branding
Una estrategia de branding es un plan estructurado y a largo plazo que una marca diseña y ejecuta para destacarse de la competencia y hacer que los consumidores se identifiquen con ella, prefiriéndola sobre la variedad de opciones que ofrece el mercado.
El branding va más allá de elegir un nombre, logotipo o colores corporativos atractivos, involucra un conjunto de atributos y valores intangibles que vuelven a la marca única y relevante para un target específico.

En el branding se potencian las percepciones positivas de la marca y se resaltan todos aquellos valores que la diferencian. El mensaje que se envía es más emocional que racional. No se trata de vender productos, sino sentimientos y experiencias, posicionando a la marca en la mente de las personas y creando lazos estrechos entre ambas.
Puntos clave para diseñar una estrategia de branding
Como mencionamos anteriormente, la estrategia de branding es un plan a largo plazo que se desarrolla para garantizar la continuidad de la marca en el mercado; sin embargo, es importante que sea flexible para que pueda adaptarse a los cambios constantes que vivimos.
Existen algunos puntos que los expertos recomiendan tomar en cuenta al momento de diseñar una estrategia de branding:
1. Conoce a tu buyer persona
Conocer a nuestro cliente es la base para crear cualquier estrategia de marketing, por lo que elaborar un perfil de nuestro buyer persona resultará verdaderamente útil en la creación de la estrategia de branding.
El buyer persona es una representación ficticia de tu cliente ideal, es el arquetipo de esa persona que compra tus productos o servicios. Este personaje se crea a partir de datos reales relacionados con sus características demográficas, historias personales, problemas, necesidades, preocupaciones y motivaciones.
Estos datos serán fundamentales para crear mensajes que te permitan acercarte mucho más a esas personas reales que están dispuestas a comprar tus productos y convencerlas de que eres la mejor opción.
2. Establece tus objetivos
¿Qué quieres lograr: aumentar tu notoriedad en el mercado, incrementar ventas, mantener una buena reputación, etcétera? Recuerda que los objetivos deben ser SMART: específicos, medibles, alcanzables, relevantes y delimitados en el tiempo.
3. Analiza a la competencia
Para la creación de marca, es importante echar un vistazo a los competidores para conocer qué acciones están tomando para posicionarse en el top of mind de los consumidores y valorar el lugar que tú ocupas. Analiza sus sitios web, redes sociales y haz una búsqueda en Google de las palabras clave que mejor representan a la categoría en la que te mueves.
4. Analiza tu DAFO
Es fundamental hacer un diagnóstico de tu marca basado en las siglas DAFO:
– Debilidades: Características internas que suponen un punto débil o pueden afectar la reputación de la marca. Piensa en esos atributos que te gustaría cambiar si se dieran las condiciones adecuadas para hacerlo.
– Amenazas: Circunstancias externas que podrían afectar la imagen de la marca o su capacidad de influir en el mercado. No son modificables.
– Fortalezas: Atributos internos que representan una ventaja competitiva frente a los competidores y que es posible aprovechar para influir en la percepción y decisión de compra de la audiencia.
– Oportunidades. Circunstancias externas que afectan a la marca de forma positiva. No se pueden modificar pero sí aprovechar.
El análisis DAFO te ayudará a comparar las características de la marca con las de la competencia y analizar todos aquellos aspectos que pueden afectar su imagen y posicionamiento en el mercado, tanto positiva como negativamente.
5. Desarrolla tu manual de identidad corporativa
Se refiere a todo lo relacionado con la expresión gráfica de tu marca, como naming, tipografía, logotipo, eslogan y colores corporativos, los cuales serán útiles para que la marca mantenga una uniformidad independientemente de los soportes o canales que se utilicen para su difusión.
Todos estos elementos, utilizados de la manera correcta, pueden activar distintas emociones y crear una conexión especial entre cliente y marca.
6. Define canales de comunicación
Elige los medios por los cuales comunicarás tu identidad de marca, estos pueden ser tradicionales, digitales, gratuitos o de pago.
Hoy en día, existen diferentes canales de comunicación, desde televisión, anuncios impresos, publicidad exterior, redes sociales, publicidad display, influencers, punto de venta y relaciones públicas. La selección dependerá de los medios que consuma tu público objetivo.